La mayoría de los automóviles modernos tienen frenos en las cuatro ruedas, accionados por un sistema hidráulico. Los frenos pueden ser de disco o de tambor.

Los frenos delanteros juegan un papel más importante en la detención del coche que los traseros, porque el frenado lanza el peso del coche hacia adelante, sobre las ruedas delanteras.

Por ello, muchos coches llevan frenos de disco en la parte delantera, generalmente más eficaces, y frenos de tambor en la parte trasera.

En algunos automóviles caros o de alto rendimiento se utilizan sistemas de frenos de disco, y en algunos automóviles más antiguos o más pequeños se utilizan sistemas de frenos de tambor.

Frenos de disco

El tipo básico de freno de disco, con un solo par de pistones. Puede haber más de un par, o un solo pistón, que acciona ambas pastillas, como un mecanismo de tijera, mediante diferentes tipos de pinzas: oscilantes o deslizantes.

Un freno de disco tiene un disco que gira con la rueda. El disco está montado sobre una pinza, que contiene pequeños pistones hidráulicos accionados por la presión del cilindro maestro.

Los pistones presionan pastillas de fricción que se aferran al disco desde cada lado para frenarlo o detenerlo. Las pastillas están diseñadas para cubrir una amplia sección del disco.

Puede haber más de un par de pistones, especialmente en frenos de circuito doble.

Los pistones se mueven solo una distancia mínima para aplicar los frenos, y las pastillas apenas se separan del disco al soltarlos. Carecen de resortes de retorno.

Al frenar, la presión del líquido presiona las pastillas contra el disco. Sin el freno activado, ambas pastillas apenas rozan el disco.

Los anillos de sellado de goma alrededor de los pistones están diseñados para permitir que los pistones se deslicen hacia adelante gradualmente a medida que las pastillas se desgastan, de modo que el pequeño espacio permanece constante y los frenos no necesitan ajuste.

Muchos coches más recientes incorporan cables de sensores de desgaste integrados en las pastillas. Cuando las pastillas están casi desgastadas, los cables quedan expuestos y el disco metálico los cortocircuita, lo que enciende una luz de advertencia en el panel de instrumentos.